9 de Noviembre de 2015
04:30 de la madrugada del
lunes
" ¿Están golpeando la puerta? No puede ser, ¿Me ha seguido?
¿Ha vuelto? No puedo arriesgarme, tengo que esconderme, y visto el éxito anterior
me esconderé donde la última vez, seguro que aquí no me encuentran.
Acabo de oír cómo han tirado abajo la puerta, definitivamente
quieren algo de mí, pero no sé el qué, ¿Y si quieren matarme? Ojalá nunca me
encuentren, si hace falta me quedaré aquí días.
- Vamos Juan, se dónde estás, ¿Sales o te sacamos nosotros? - Dijo
uno de los tres encapuchados que me esperaba detrás de mi puerta.
No hice absolutamente nada, me quedé en mi sitio incluso
intentando respirar lo mínimo posible, no quería creer que de verdad sabían dónde
me escondía.
- Bueno, pues vamos a pasar a ver si así te das por enterado. -
Dijeron.
Me temblaba todo, me podía notar el corazón, parecía que se me iba
a salir por la boca.
- Visto que llevamos dos minutos esperando enfrente tuya y no te
has dignado ni a asomarte a vernos, hemos decidido en respetarte de alguna
forma y bueno, te lo diremos desde aquí. Nos asombra que hayas sido capaz de no
quedar traumatizado después de la primera vez que te visitamos, al igual que
nos asombra que hayas sido capaz de buscar respuestas así como de nuestro símbolo
o de las personas que visitamos. Estamos sorprendidos por ello, pero basta, no empieces
una guerra que no puedes ganar, no sabes dónde te estás metiendo. Ahora mismo,
podríamos sacarte de ese ridículo escondite y hacer que no despertases nunca
más, pero igualmente creemos que después de esta situación a la que te estamos
sometiendo, no seas capaz de soportarlo y tal vez hagas tú mismo que no
despiertes al igual que ese tío que buscabas tan ansiadamente el otro día.
Sinceramente, aquí te quedas, confiamos en tu mente y ese dote, si se puede
llamar así, que tienes de darle tantas vueltas a las cosas. Adiós. - Comentó
uno de ellos, seguramente el líder por la seguridad de sus palabras, y
seguramente la misma persona que se ve que me sigue a todos lados."
13 de Noviembre de 2015
07:00 de la mañana del
viernes
"Cuatro días desde que me desperté de esa pesadilla, cuatro
días y lo único que me he atrevido a hacer es comer lo justo y necesario, ni
asearme, ni salir a la calle, ni nada, estoy totalmente aislado, estoy fuera
del mundo, solo pienso en esa pesadilla, en todo lo que me dijo ese tal XIII,
tengo miedo, mucho miedo, no sé qué hacer, no se lo he dicho a mis padres
tampoco, tengo miedo de que me manden al psicólogo y me crean loco. Lo único
que me apetece es escribir y pensar en cómo puedo solucionar esto, y parece
bastante obvio que tengo que hacerlo yo sólo."
07:22 de la mañana del
viernes
"Están llamando a la
puerta otra vez, espero que no sea él, no sería capaz de soportarlo de nuevo.
- Abre, tenemos que hablar. - Me decían al otro lado de la puerta
y yo, acojonado, ni me atrevía.
- Vamos, sé que estás ahí y he de explicarte muchas cosas, prometo
no sacar el arma. - Decía con tono de amistad, y yo pensando por qué ese cambio
de actitud.
- Soy XIII, y al contrario de lo que piensas, sólo intento
ayudarte, ¿Quieres que combatamos esas pesadillas? Trabajemos juntos, a pesar
de lo atormentada que tendrás la mente ahora mismo, te veo capacitado,
enhorabuena, estás despertando."
No hay comentarios:
Publicar un comentario